14/5/13

México y las mujeres


Este es un país de más mujeres que hombres. El INEGI en su censo del 2010, reportó que existen en México 57 millones de mujeres y  55 millones de hombres. En los puestos de poder y altos mandos, no se nota. Hay más mujeres que hombres y esto puede ser porque existen más obstáculos para que una mujer pueda ser mujer-madre y mujer-trabajadora.

Lo que quiero decir es que se nos ha repetido hasta el cansancio por medios de comunicación y discursos de mandatarios que este es un “país de oportunidades”, pero esas oportunidades no son para todas y todos.
Dice Denisse Dresser en la columna publicada en el Reforma el 13 de mayo titulada ¿Tenerlo todo?,  “De 190 líderes de Estado, sólo 9 son mujeres. De todos los parlamentos del mundo sólo 13 por ciento son mujeres. En los altos rangos del sector corporativo sólo 15 por ciento son mujeres”. Esto en México, es más marcado.

Es más marcado porque en los puestos gerenciales, altos mandos y jefaturas,  (por favor, quiero que hagan memoria y recuerden cuantas mujeres los ocupan en sus centros laborales) lo habitual es que se sólo se les otorguen estos puestos en las áreas referentes a relaciones públicas, comunicación y equidad de género, porque claro, las mujeres son las más indicadas para dichos temas, pero por favor, que no sean casadas o madres, porque “esas” faltan mucho al trabajo y les quita mucho tiempo atender sus hijos.
Como mujer-trabajadora, he escuchado varias veces hacía a mí o a amigas el argumento de jefes en el trabajo, “si prefieres dedicarte a tus hijos o la casa, puedes hacerlo y no tener que trabajar”, es decir, se nos obliga a elegir entre ser mujer-madre y mujer-trabajadora, como si la triada mujer-madre-trabajadora no pudiera existir y ser efectiva.

Existen mujeres claro, que han ejercicio el poder al que tienen derecho de no tener hijos, y aún así, no tienen las mismas oportunidades ni son tratadas igual que otros hombres.

¡Qué razón tiene Dresser!, la economía y la sociedad en México y en muchos otros países no están estructuradas para que las mujeres lo tengan todo.



La columna de Dresser pulsando AQUÏ

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